7/11/20

Cuando te veo

 

Encarcelada en el mismo instante,

dejo que pase el tiempo.

Cicatrizó ya en su momento,

la herida que tú me causaste.

No con ello quiero culparte,

pero así es lo que yo siento;

lanzo un infinito lamento:

te fuiste y te vas,

amor errante.

Alfiletear mi cerebro

 es tu forma de vengarte

y, aunque niegues,

es bien cierto,

 que, a pesar del daño, tiemblo

 y no consigo olvidarte.

Amarte a ti es todo un arte

y me trago tu veneno,

que, a sorbos, saboreo

 desde el día en que me dejaste.

No hay comentarios: