Duérmete, húndete en tu cama y sueña tranquila, protegida por tu techo. Descansa plácidamente que el trabajo que tenías demorado ya lo has realizado. Fue la última cosa que tachaste de tu lista de asuntos pendientes y ahora, debes recuperarte. Amor, déjate mecer por la paz de la noche y descansa, descansa serena. Tal como pediste, evitaré volcar mi aliento sobre tus párpados cerrados. Tal como tachaste, cogeré mi maleta y mi dolor, y nos iremos lejos de ti, a magnificarte.
3 comentarios:
ouch :(
El sacrificio del Amor...
Claro y conciso. Me ha gustado mucho Dintel.
;)
Dintel, a veces no sé que decirte. Mejor te dejo un beso
Publicar un comentario