7/12/10

La vida no se detiene

Es tan difícil encontrar palabras de consuelo. Y más que palabras, pues me hallo sumida en el silencio, es difícil encontrar rincones en las entrañas donde el pensamiento no pueda acceder. Sucedió este día 3, una llamada anunciaba tu partida. Desde entonces busco el tono en mi escritura y el temple en mi persona. Busco palabras con las que llenar hojas y hojas evitando así derramar el vacío que siento pánico de poseer.

Leo:

Se necesitan muchos días sin oír al teléfono la voz de una persona para acostumbrarnos a su ausencia: se necesitan muchos días reprimiendo el impulso de llamarla para acostumbrarnos a que ya no contestará, se necesitan muchos días guardándonos comentarios que solo a ella haríamos para acostumbrarnos a que en adelante será así, se necesitan muchos días preguntándonos qué diría de algo sobre lo que, sabemos, tendría opinión más certera que la nuestra para acostumbrarnos a que a partir de ahora deberá bastarnos con nuestro criterio, se necesitan muchos días mirando sus fotos para acostumbrarnos a que son las fotos de un muerto, se necesitan muchos días contemplando lo que nos legó para acostumbrarnos a que ya no es suyo sino nuestro, se necesitan muchos días haciendo recuento de vivencias comunes para acostumbrarnos a que jamás se repetirán, a que solo nos queda la memoria. Una memoria, además, que no permanece inalterada.

Leo esto, concuerda con lo que siento y desespero.

15 comentarios:

Blau dijo...

Querida Dintel,
Lo siento mucho. Ya llevas 4 días, empieza la cuenta. Yo llevo 730 días y creo que me falta una ternidad.
Un abrazo.

Jeanne dijo...

No sabía nada.

Supongo que no hay palabras para definir lo que debes estar sintiendo.

Te dejo sobre la mesa una infusión de tila con naranja. No puedo hacer nada más.

Jeanne

Raquel dijo...

Dintel,
lo siento mucho. Te doy un abrazo grande tratando de aliviar el peso de la ausencia.

María dijo...

Un abrazo.

leo dijo...

Un abrazo grande, con todo mi cariño.

Tantaria dijo...

Hay pérdidas a las que una no se acostumbra jamás. Y, por mucho que que la gente diga que la ausencia es el olvido, hay gente que ha muerto y que yo siento que me quiere aún.
Lo siento muchísimo.

frida dijo...

...se necesitan muchos dias para reconocer que ya nada será como antes...se necesitan muchas lágrimas,muchas noches sin dormir, muchos pensamientos negativos...La vida no se detiene,y nosostros tampoco.

Allek dijo...

Hola, después de otro tiempo he regresado con un nuevo texto..
te dejo un fuerte abrazo!
y desde ya felices fiestas!

Any_Porter dijo...

Lo lamento. Es difícil sentir que alguien se escapa así de tu vida, casi de puntillas, pero dejando un hueco tan enorme que el vacío te carcome por dentro. Sí, es un dolor y una desesperación ausente a la que tardas en acostumbrarte. No puedo decirte cuántos días hace, para mí el tiempo es como una espiral canibal que se engulle a sí misma y se desdibuja. Y nada que pueda decir ayudará, porque el dolor es distinto para cada uno y se supera como se puede. Ánimo para esa segunda novela. Puede ser muy interesante leer tu punto de vista. Y olvida formas y estilos. Es mucho más importante que sientas lo escrito.

Biquiños.

Jirafas en Gerundio dijo...

Gran abrazo y mis deseos de que el dolor se atenúe cuanto antes.

Sandra Sánchez dijo...

Me ha encantado.

AdR dijo...

Un beso

YoMisma dijo...

Besos

YoMisma

Tawaki dijo...

Espero que esos días tan necesarios pasen como una exhalación.

Besos.

Nosu dijo...

me acabo de enterar ahora dintel, lo siento mucho. Apóyate en tu seres queridos... y lucha contra tu propia tristeza. Ojalá fuera tan fácil de hacer como de decir.

Un beso