12/2/11

Sé lo que estás pensando

Ahora leo poco, no parezco yo. Pero es lo que hay. He aumentado la cantidad de proyectos y les tengo que dedicar tiempo. No me queda otra que retárselo a la lectura. Hace casi un mes que tenía este libro entre manos, me lo dejó una compañera el día que se lo acabó: “está bien, es distraído”.

Tardé un par de semanas en empezarlo. Luego me quedé estancada en un capítulo, me daba una pereza leerlo… Cuando conseguí saltar el obstáculo fue este domingo pasado y desde entonces he vuelto a coger el ritmo lector. A pesar de que seguramente en breve voy a tener que abandonarlo de nuevo.

Excepto el trozo en el que me quedé bloqueada me ha gustado la novela y ha mantenido mi interés, eso sí, más la historia que como está escrita, por cierto, llena de errores. Lo que más me ha molestado es que en algunos capítulos el nombre del protagonista que era Dave aparecía traducido, David (bueno, supongo que esta es la traducción), me daba la impresión de que me tomaban el pelo y al principio pensé que era otro personaje. Me ha parecido tan patatero el asunto, daba la impresión de que lo había traducido dos personas diferentes y que nadie lo había revisado al final. Tanto es así que he llegado a dudar de que no estuviera hecho adrede y formara parte de la trama. Porque he de confesar que me he saltado párrafos enteros pasando de los momentos descriptivos para ir directamente a la acción.

Me habían dicho que la solución del enigma era muy sencilla pero yo no la he encontrado sencilla, me ha gustado y no me he sentido defraudada. Hay momentos en que el misterio y la acción acaparan totalmente tu ser y te olvidas de donde estás. Al menos me ha pasado a mí.

9 comentarios:

Irreverens dijo...

Vaya... yo se lo regalé a mi hermano para Reyes sin haber podido encontrar una crítica de primera mano.

Ya le preguntaré qué tal.
:)

Ah, y me temo que eso que comentas de que parece haber sido traducido por 2 (o más) personas... suele ocurrir mucho más a menudo de lo que nos imaginamos.
:(
Los plazos que dan las editoriales para traducir algunas obras son humanamente imposibles, por lo que hay que repartirse el trabajo. De pena, sí. Entre esto y otras maravillas del mundo traductoril, yo misma estoy a punto de abandonar el barco.

Besos, Dintel, que hacía tiempo que no comentaba (pese a seguir leyéndote).
:)

dintel dijo...

Comentarte que me parece un verdadero rollo que un trabajo que debería ser lo más perfecto posible, por culpa de los plazos se convierta en un salir del paso.
En fin, que deberé estudiar idiomas para traducir yo misma mis novelas, digo yo, ejem....

Me alegra saber de ti.

Elena Casero dijo...

Es una verdadera lástima que haya novelas infumables por culpa de las traducciones. Una pena.

Ahora estoy leyendo lo que puedo, pero me he metido en cursos de escritura y tengo una novela empezada, a medias y quiero volver a cogerle el hilo.

Pasaré a leerte.

Por cierto, lo que me dijiste del relato anterior, me parece muy apropiado.
Se agradecen las criticas.

Un abrazo

dintel dijo...

Elèna Casero, pues a ver si consigues seguir con la novela. También tengo una a medias, bueno, a principios, y le dedico menos tiempo del que me apeteceriera.

Mis críticas son desde el más absoluto desconocimiento de la teoría, o sea, son para ser criticadas, también.

Otro abrazo.

Raquel dijo...

A veces, cuando las traducciones son malas, es como una pesadilla leer un libro. La verdad es que no sabía que lo de las traducciones podía funcionar así. Qué triste, la verdad.
Un abrazo y de paso, otro a Irre y a Elèna.

dintel dijo...

Realmente no sé si la traducción es mala o qué. Mi conocimiento no llega a tanto. Me di cuenta de lo del nombre y nada más.

Abrazo recibido. Otro de vuelta.

Irreverens dijo...

Yo he llegado a experimentar lo malo de una traducción en un caso muy concreto: había leído varios libros de un mismo autor, que me gustaba, hasta que un día leí uno que me defraudó. Me fijé en el autor de la traducción y, por primera vez, no era el mismo que el de las obras anteriores.
Realmente, el traductor puede hacer mucho daño.

Ah, ¡pero también mucho bien!
Que muy a menudo arreglamos cada desaguisado...
:)

dintel dijo...

Irreverens, seguro que hay más que arreglan que destrozan. Al menos quiero creerlo

dfs dijo...

A mi me ha parecido una novela mala. Mal escrita y mal solucionada. Mi opinión en mi blog: http://ellectoravisado.blogspot.com/2011/03/se-lo-que-estas-pensando-john-verdon_06.html