26/7/19

Día de fantasmas


No hay cosa que me produzca más placer que escribir a oscuras. La pantalla iluminada del ordenador fija la atención absolutamente. Ya sé que no es demasiado saludable para la vista, y, por otra parte, no lo acostumbro a hacer. Pero esto no quita que me guste. Me distancio de mí y me imagino cómo debe iluminar mi cara. Seguro que es una visión mortecina. Me sonrío al pensarlo. Hoy es un día especial, muy especial. Pienso en mis queridos fantasmas. Me acostumbran a acompañar, en este momento, los tengo más presentes. Los quiero, no puedo evitarlo. Me hacen sentir bien porque, a pesar del frío de lo intangible, me mantienen el alma cálida, cosa que necesito para poder seguir mi vida. De ahí la oscuridad alrededor de la pantalla, para que puedan campar a sus anchas.

2 comentarios:

NOOR dijo...

Que campen...que campen a sus anchas...nada como celebrar los dias especiales rodeadas de fantasmas....de los nuestros..dias especiales con tempo caribeño..saludos cordiales señora.

dintel dijo...

Noor, sí, al final parecen parte de nuestro alter ego.