7/1/14

Generosidad

El silencio es la condición sine qua non de la existencia de la generosidad. Su más fiel compañero, en gesto, mirada y acto. Ella, la generosidad, te encuentra sin necesidad de buscarla. A la persona que la posee no le gusta publicitarse. Pero si eres buena observadora, descubrirás en el sonido de sus palabras un cierto terciopelo y en sus actos la típica cadencia, acumulada tras una vida munífica.
Doy fe, que bajo el cielo que me cubre y en la misma tierra que habito, más allá de lo que pareciera, la generosidad aún se halla en alguna de las personas. 

2 comentarios:

maslama dijo...

pues sí, existen personas maravillosas

hiro dijo...

Por suerte todavía existen personas generosas, de esas que dan porque sí, sin esperar nada a cambio y en silencio. Cuando las detecto, siempre me gusta agradecérselo con un sincero "gracias".

Abrazos! :)