El tren para más o menos donde Elisa tiene calculado que lo hará, es mucha la experiencia que se coge durante catorce años, seis veces por semana. A esa hora, son siempre los mismos que se agrupan en la puerta para subir los primeros y adjudicarse un asiento seguro.
En general, el viaje transcurre en silencio. La mayoría de los pasajeros prefiere dormitar. Son casi todo trabajadores de la construcción o mujeres que van a casa ajenas a realizar faenas del hogar.
A Elisa le gusta observar. Se fija en todo. Le encantaría escribir sobre ello pero le da pereza tomar notas de lo que está viendo; sabe con seguridad que luego no se acordará. Piensa que si hubiera anotado desde un principio otro gallo cantaría, porque catorce años dan para tener mucho material acumulado. Pero se contenta con observar e ir escribiendo con sus pensamientos. Así, con la rapidez de estos, cada viaje es una novela.
20 comentarios:
Dintel, y tu libro como va? eh! estas tardando muuuchooo.
Besito
siempre que te leo lo haces parecer taaan facil : )
:) Me recuerda a mí hace años
una buena obsevadora como tu sería muy buena escritora...
Y es que eso ocurre, eh.
:)
Cierto cuanto material si lo que se escribe con los pensamientos quedara plasmado en los cuerpos blancos.
Sigue pensando.
Buenas maneras de distraerse en el mundano ruido del metropolitano.
ejem...Es que viajo poco en el Metro.
En cambio, desde la ventana de la "Furgonetilla", las calles, las motos, los coches, (el mio)...las gentes agolpadas en los semaforos...Todo esto lo supero escuchando musica, en la radio-casette.
Besos, de vuelta del viaje del Sur.
Jesus
El sabado estuve en Barcelona y cogi el metro a las 7h de la manana. Habia la misma gente que describes. Caras dormidas y tristes. Y si que es veradad que te dan ganas de escribir. El proximo finde me llevo una libretita !
y,¿por qué Elisa?
es imposible aprehender todas las historias que se cruzan en nuestra vida... elisa es lista y no lo intenta. mejor vivir.
Yo me lo cuento a mi misma, soy mi propia narradora...
Cuando falto de tu espacio- no importa la razón- y vuelvo al cabo de unos días tengo la impresion que me he perdido algo, no es lo mismo volver y leer cuatro o cinco entradas de un golpe dandome un atracón que saborearlas despacito...me he perdido la temporalidad repetida de algo bueno.
Una novela perfecta. Así es. Me asombra esa capacidad tuya de percibir y escribirlo de tal forma que... bueno, transparente y bellísimo.
es cierto, a veces en el bus entran ganas de escribir lo que vas viendo.ciao
es curioso, cuando vamos en un medio de transporte observar a desconocidos...imaginar su vida...mola
hola guapa;
otro pasajero escribirá sobre elisa, espectadora y actriz en el tren que recién pasó..
besos,
Sí, es curioso imaginar vidas ajenas, uno se puede inventar una película que posiblemente nada tenga de cierto.
El lugar que a mí más me apasiona para observar, es la playa. Aunque llevo música y lectura, siempre dedico una buena parte del tiempo a ver a la gente y oír sus conversaciones, es como una especie de hipnósis. Supongo que mi ramalazo cotilla asoma en esas ocasiones.
un beso
Al menos Elisa, aún puede ver obreros de la contrucción acudiendo a su trabajo...
Besos
es que no solo se viaja en espacio, también en tiempo, besitos
Cada viaje una novela y la agrupación de tantos años, una enciclopedia de Psicología aplicada...
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