3/12/09

Mis libros

He tomado una determinación, voy a deshacerme de todos mis libros. No tengo más ganas de venerarlos como si ellos contuvieran la respuesta y el secreto de la piedra filosofal. No quiero seguir realizando ninguna alquimia con ellos. No son más que páginas llenas de letras, palabras, de textos, de historias y tiempos, de sangres y pensamientos de escritores. Formaron parte de mí las horas en que los tuve entre mis brazos, y me zambullía en sus páginas para nadar los largos que necesitara para disfrutarlos. ¿Pero, y luego? Luego se han convertido en el picoteo de algún día melancólico, en el acariciar los lomos recordando algún momento en el que me acompañaron, en el verlos, ahí, en las estanterías, quietos, mientras yo estoy tendida en mi sofá. Pero nada más.

No nada más en ellos. ¿Cuánto tiempo más deberé seguir leyendo para encontrar alguna respuesta a mi vida? ¿Cuántos libros más deben pasar por mis manos para poder encontrarme a mi misma?

La decisión está tomada: voy a deshacerme de todos mis libros.

21 comentarios:

Irreverens dijo...

¿Esto es autobiográfico o no?

Chica, es que me tienes pelín desorientada.

En cualquier caso, se pueden mandar a una ONG para que los repartan entre estudiantes de América Latina o algo así.
:)

M. dijo...

No me lo creo.
Pero de ser verdad tu no te preocupes por nada, yo te mando un seur de esos y me hago cargo de ellos :))

AdR dijo...

Con dos cojones, sí señora.

Sandra Sánchez dijo...

Eso es verdad?...
Yo antes me compraba libros porque me gustaba tenerlos después de leerlos, pero ahora compro sólo los que realmente quiero tener el resto procuro sacarlos de la biblioteca o que me los presten porque me ha dado cuenta de que nunca he releído un libro.
Pues nada si eso es cierto puedes donarlos a la biblioteca, o hacer boocrossing con ellos (http://www.bookcrossing-spain.com/)
Ya nos dirás...jeje.
;)

Anónimo dijo...

Jajajajaja, ¡Anda yaaa!!!!
Porque tus libros son tu vida no me creo ni una palabra (escrita).

leo dijo...

Ays, yo creo que solo podemos encontrarnos a nosotros mismos en nosotros mismos. Buscarnos fuera no tiene sentido.
En cuanto a los libros... "Ellos no lo harían" :-(

Pena Mexicana dijo...

Muy bien. Voy a responder como si esto fuera autobiográfico: te felicito. Hace un par de vidas yo era una persona que atesoraba mis libros y los de mi familia. Me leí TODOS pero eran muy pocos los que releía. Un día me sentí como el que aquí llaman Tío Gilito. Tenía todos esos libros allí muertos sin que nadie les diera vida con su lectura. Los dejé ir: los más queridos los regalé a quien sabía que los iba a apreciar, los demás los doné a una biblioteca pública que hasta me dio una carta de agradecimiento por mi "generosidad".
Me sentí... ¡libre! tanto como eran ellos ahora.
Desde entonces, acudo a la biblioteca, leo de prestado... y soy una lectora mucho más feliz. Cada cabeza es un mundo :)

Super Yors dijo...

Estoy con Leo nos encontramos en nosotros mismos.

Lo de los libros... si te vas a deshacer de ellos dónalos

Hasta el infinito y más alla

Candela dijo...

Como Pena, consideraré que es autobiográfico. Yo he ido atesorando libros hasta no caber en la casa y en mi última mudanza decidí desprenderme de al menos la mitad: los que no me gustaron, los que me traían malos recuerdos, los que intenté leer varias veces y me resultaban intragables... y así un montón. Los regalé a quienes los quisieron.

Sin embargo he prestado libros que no habría querido perder por nada del mundo, que nunca me han devuelto ni me devolverán y están descatalogados.

Son tus libros, haz lo que quieras con ellos, regálalos o véndelos a una librería de ocasión (también puedes quemarlos si se lo merecen jajajaj).

E. dijo...

Nena, qué drástica.

MI HISTORIA... dijo...

No suelto ni uno, porque en cada uno de ellos he dejado una gota de mí. Me gusta contar que en el tiempo que sucedió esto o aquello yo leía tal o cual libro. Me gusta volver a leer algunos porque es más que probable que lo entienda de manera totalmente diferente y otros no los vuelvo a leer precisamente porque quiero conservar lo que me dijeron en su momento. Sin embargo respuestas no espero encontrar en ellos, sólo pequeños empujoncitos para continuar.
Muxuxxxxxx

YoMisma dijo...

Jo!

Yo no podría... sería como deshacerme de una parte de mi.

Y en su lugar que? Pones plantas?

Saludines,
YoMisma

Me sumo a quedarme con ellos, haz una lista y nos los repartimos tus lectores

Spica dijo...

...es esa la solución a tus preguntas y el rincón en el que te encontrarás a ti misma???...si es así mucho estás tardando, pero si no lo es...simplemente te quedarás sin libros...en cualquier caso quien no arriesga no gana...así que ¡adelante!...suerte y un abrazo grande...

Blau dijo...

Dintel, no me queda más que felicitarte, con esta actitud te acercas a esa bonita tendencia del minimalismo.

Besos

Ico dijo...

Son dos cuestiones bien distintas: una cosa es deshacerte de los libros leídos por necesidad de espacio o de vacío y otra no leer más para encontrarte.. ¿ se lee sobre todo por placer ?¿no? ..y luego.. a lo mejor encuentras u otros mundos..Mejor usa la biblioteca y deja de comprar tanto... besos

pyxis dijo...

MisC luego de leer los libros los regala, al principio yo no lo entendía, pero al ver su biblioteca igualmente repleta, con estantes de dos y tres filas, entendí que era una buena práctica.
Claro está que yo con mis cajitas, frasquitos, lápices y demás todavía no he podido tomar la decisión de desprenderme de ellos y eso me lo hacen notar a cada rato :(
Besos dobles...

Raquel dijo...

Qué difícil separarse de los libros. Ahí están, como tesoros, momentos y todas esas cosas que dices. Apenas los releemos. Se convierten en parte del paisjae de nuestras vidas. ¿Qué hacer?

elojocadaver dijo...

Será inútil, al menos para los libros con alma. Los libros con alma después de tirarlos vuelven a casa, pero reencarnados en objetos. Esa llave oxidada, ese calcetín sin par, ese tornillo, esas gafas de leer que no conoces fueron un libro que un día tiraste.

horabaixa dijo...

Hola Dintel,

Leer, por el puro placer de leer es suficiente. Propios o extraños, qué más da?.

Hay personas que núnca dejan de buscar(se). Y no sólo en los libros.

Un abrazo

illeR dijo...

Me los pido!!

Señor De la Vega dijo...

Acumulo libros y papeles, en proporciones parecidas, la gran mayoría sin tan siquiera haberlos leído. Un día paseando encontré una caja llena de libros, hablaban de economía y los recogí y los trasladé conmigo, jamás los he leído, pero los salvé del basurero.
Siempre creí, que el objetivo de guardar libros era dejarlos como herencia, para que una cantidad de descendientes aún no procreados, al leer lo que yo almacenaba, sintiese o racionalizase en parte, mi yo educado, mi yo leído.
Pero mi teoría falla estrepitosamente, jamás he leído la literatura completa de mi padre (suponiendo que él se la hubiese leído) y dudo que algún descendiente lea la mía. ¿Y qué significaría en toda esta teoría la caja rescatada de libros de economía que solo ordené por temas?.
Hoy ya podemos tener en un ordenador y muy pronto en un e-book, todo el canon literario universal, sin dificultad ni coste ni espacio ni interés... e igual que lo tenemos, con un botón borrarlo.
Pienso sinceramente, que lo responsable para generaciones futuras, debería ser, el dejar nuestra crítica, análisis u opinión escrita de los libros que hayamos leído y hayan merecido tamaño esfuerzo, para que los descendientes y los presentes, lean nuestra lectura y vean por nuestras mentes, quizás aprendiendo, tal vez desaprendiendo nuestra puntual cultura e incultura, al tiempo de leerlos, porque cada lectura, va unida a un yo que no regresa, también a un tiempo y a un momento. Un libro es un poco lo escrito, pero sobre todo, es bastante más una lectura de lo que fuimos, de lo que entendimos, de lo que aprendimos, de lo pasado, y así nos transformamos poco a poco fundiéndonos con ideas y palabras que nacieron en los otros, recreándonos en lo ajeno para hacerlo nuestro y volvernos más grandes o más pequeños al momento de leerlo junto al resto de humanos que lo hacen o lo hicieron o lo harán.

Bueno, en el 2010 empezaré, releyendo o/y escribiendo sobre toda la biblioteca que poseo y mañana mismo sin falta volveré a dejar aquellos libros de economía en el basurero que merecen, del resto de páginas, con o sin tapas que roban mi espacio esperaré al 2012.
Suyo, Z+-----