16/1/08

Firmin

Leyendo el blog de La Letra Escarlata, en uno de los comentarios que le hacían, encontré la referencia de este libro y creí que me podría gustar. La realidad ha superado en mucho a las expectativas: lo he devorado como si fuera una golosina. En el confluyen dos temas que me gustan mucho: la literatura y los ratones.

Un ratón que vive en una librería nos cuenta en primera persona su vida. A fuerza de comerse los libros de pequeño para no pasar hambre aprende a leer.

Hallándome en las primeras páginas pensé que las casi trescientas restantes se me harían un poco aburridas, ¿qué me podría contar un ratón que me interesara?, estaba segura que la sorpresa de las primeras páginas se convertiría en un “másdelomismo” y acabaría por finalizar su lectura entre el tedio propio del libro y la falta de concentración que el aburrimiento de este me despertaría. Pero no ha sido así, para nada ha sido así. Me he zampado sus páginas, disfrutando de las descripciones que desde la perspectiva roedora contiene, he paladeado un excelente buqué de lenguaje y amenos giros lingüísticos.

No he leído nada más de Sam Savage y como siempre, me pondré a investigar si tiene algún otro libro que me permita disfrutar como este.

NOTA: La descripción de cómo maman Firmin y sus hermanos de su madre Flo no tiene desperdicio, según mi parecer, claro está.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Buena recomendación, queda anotado.
Bss multicolores y buen finde!!

Mármara dijo...

¡Joder! he leído antes el último post que éste y me parece que esta tarde, que he de ir a "EL Corte Inglés" no me va a quedar más remedio que hacerme con él. Ycon el de arriba.

Joven Eriza dijo...

jjajaja, quién me presta éste??? Yo también he empezado leyendo el último post...


Apunto en la libretica, tié buena pinta ;)

Lucía dijo...

Yo vi un reportaje con ilustraciones hace poco de este libro y la verdad es que tenía muy buena pinta.

AdR dijo...

Yo lo tengo en mi estantería, temiendo a que yo le hinque el diente, que será pronto :)

Un abrazo

Marcela dijo...

Qué casualidad, no había leido tu post, pero este fin de semana me compré este libro, ahora lo leeré con más ganas aún.