El otro día llovía. A la que acabé de trabajar me encerré en
casa. Me senté en el sofá y me puse a sentir. Sí, a sentir. La lluvia me trae
recuerdos de amor. De caminar las dos bajo el mismo paraguas, apretaditas,
descubriendo nuevas sensaciones. De noches en la cama, charlando y riendo, y
abrazándome ella por sorpresa a cada trueno, porque se moría de miedo. De salir
corriendo a destender la ropa y para que no cogiera olor a lluvia ni a humedad
y tenderla por el comedor entre risas y besos para que se seque. O duchándonos
nada más llegar a casa empapadas por el chaparrón que nos había caído encima. Frotando
su espalda con la esponja y su cuerpo con mi amor.
Son muchos recuerdos, que despiertan sensaciones a flor de
piel y a flor de entraña. ¿Llegará el día en el que pueda convertir tanto amor
en desamor para poder seguir viviendo?
8 comentarios:
Si tan grande es ese amor,
¿Por qué te perseveras en matarlo?
¿No es mejor que vuelvas a frotarle la espalda?
Invítale a una ducha!!!
Vive, vívelo, vivirlo.
Si se quiere la lluvia puede llegar a ser sensual, reparadora, relajante... y no creo que haga falta convertir el amor en desamor para seguir viviendo. Vive con él, sin ella, con ella, contigo o con la otra.
¡Disfrútalo tú que lo sientes!
Jajajaja casi te canto eso de....felices los cuatro
Wasowski, si fuera tan fácil... si de mí dependiera... si fuera como debiera ser... Demasiados condicionamientos, creo.
Por cierto, Wasowski, enamorada de tu nick, y de tu ojito.
calcetinrayado, eso es lo que hago, disfrutar yo misma de recuerdos y avances, de retrocesos y vivencias, pero a veces el dolor, se hace presente.
Nabila, canta, canta, que al menos disfrutaremos de la armonía.
Gracias , yo tambien estoy enamorada de el!!
Las situaciones son todo lo fácil que nosotros queramos que sea.
Solo hay que tener ganas para ello.
¿ de quien depende si no es de ti ?
Nadie nos puede condicionar a llevar un amor así a galeras.
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