He entrado de puntillas en mi primer blog. Ese que ahora
permanece secreto a la deriva de la red. Ese blog, que tuve que abandonar muy a
pesar mío, debido a la inmadurez de las “relaciones” internáuticas del
principio. Y por relaciones no me refiero a nada amoroso, no, sino aquellas que
salían del contacto diario (sí, entonces teníamos contacto diario a través de
los blogs). Esa inmadurez conllevaba ataques de personas que ni conocías en la
vida real, solo porque lo que leían no les gustaba o lo que fuera. Creo que
ahora hay más respeto.
El caso es que entonces sí que me comentaba gente, un
montón. Me he dedicado a ir clicando en los nicks y la mayoría también tiene el
blog a la deriva, abandonado en el 2011, bastantes. (Será ese año el auge de
Facebock???). También he visto gente que ya entonces me comentaba y que estoy
convencida que no han sido conscientes del cambio de blog, y con ello de
personalidad bloguil.
Es curioso cómo pasa el tiempo y nos olvidamos de la mayoría
de cosas. He recordado, que lo tenía absolutamente olvidado, que antes del blog
yo escribía en tres o cuatro foros y a raíz de que uno de ellos que contenía la
mayoría de mis escritos lo iban a cerrar, una amiga me creó el blog y me enseñó
cómo funcionaba para que pudiera ir copiando mis escritos. Una vez hecho (me
pasé una noche seguida haciéndolo) empecé a publicar los nuevos.
No quiero que mueran los blogs, soy nostálgicoromántica (ole
palabra con dos tildes).
7 comentarios:
y no creo que mueran del todo (o no quiero creerlo, a mi también me gustan). Sólo que mantener un blog pide cierta vida interior, algo que contar, y lógicamente resulta mucho más fácil expresarse en un par de frases idiotas y unos cuantos selfies más idiotas todavía, si eso es posible. También requiere lectores capaces de fijar la atención en más de dos frases seguidas. alont
Hay que ver cómo pasa el tiempo. La primera de mis socializaciones en intertnet también fue en foros. Recuerdo uno que tenía "terra". ¿Dónde habrá quedado? Era muy divertido. Había uno de autonomías que duró un montón en el que se soltaban alegres burradas que hoy día, al cogérnosla con papel de fumar, nos pasaríamos la vida en el juzgado. Bendita libertad de expresión. Entraba con nick único y honrado. Tenía amigos y enemigos. ¡Si hasta una vez hicimos una kedada con comilona en restaurante!. Luego eso se fue al cuerno. Nunca me hicieron gracia los chats. Mi blog hará este marzo 10 añazos. Los blogs sólo quedan para gente a la que le guste leer, porque, para el resto, poca letra. Féisbuc, Twitter, Instagram, Snapchat...La mínima expresión de la palabra. El blog quizá no muera, pero enfermo crónico, seguro.
alonit, absolutamente cierto, pero tengo fe en que no desaparezcan las lectoras, porque, para que las haya, deben haber escritos con interés.
Juli Gan, mis inicios fueron también por Terra. Anda que no me lo pasaba bien entonces. Debemos inventar una vacuna para la cronicidad de nuestro amigo. Debemos.
Yo tampoco quiero que mueran, y aquí estamos para evitarlo!
Los foros, otros espacios donde aprendí tantas cosas...
ahroa los redes sociales están matando todo eso, igual que video killed the radio star. Incluso facebook va a la deriva, porque hay que leer un poco, en cambio instagram a tope porque es poner una foto y ya
totalmente de acuerdo con alont
Aquí seguimos algunas. Contra viento y marea (o contra Facebook e Instagram?). :) Besos y burbujas.
Yo he necesitado volver a los blogs de vez en cuando, después de que el minimalismo me atrayera muy fuertemente. Eso sí, sigo adorando Twitter e Instagram. Aunque hay cosas que mejor explayarse y es mejor no sentirse limitada por los caracteres. ¡Que nunca mueran los blogs!
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