Este año, he decidido hacer un pequeño mural visionando qué
es lo que quiero vivir y conseguir. Dicen que visionar las cosas, proyectarlas,
hace que la energía del Universo se concentre en ello. Supongo que tiene algo
que ver con la Ley de la Atracción. Uno de los primeros pasos que he hecho es
empezar a hablar sentimientos que nunca he verbalizado, al menos desde el punto
de vista que me atemoriza y me revuelve la inseguridad.
Siempre he tenido la sensación de que no soy nada sensual y
que por ello soy incapaz de seducir. He explicado que hay mujeres que me
seducen cuando se cruzan conmigo solo por cómo andan, o si estoy escribiendo en
un bar, quedo totalmente arrebatada según quien pone el azúcar en el café y lo
remueve con la cucharilla. Incluso, un amigo cada vez que coge su móvil y lo
consulta, la cadencia con la que mueve los dedos, la postura que adopta, el
gesto de sus labios al tragar la saliva, me encandila y me inquieta porque yo
quiero producir esta misma sensación en alguien.
No hay como confesarse con un amigo; la primera respuesta ha
sido casi refleja: “es que tú eres muy cerebral”. Tocada y hundida. Quizá
esperaba que me dijera que no me preocupara porque era solo una percepción mía,
que sí que seducía. La conversación ha continuado por los caminos del control
sobre mis reacciones; la conclusión, después de muchos ejemplos sobre mi
actitud ha sido que debo relajarme mentalmente, que si lo consigo, entonces y
solo entonces, lograré que mi cuerpo se relaje y conseguiré la autenticidad y
con esa verdad seduciré a las personas de mi alrededor.
2 comentarios:
Jaja esta vez ni te replico, me voy a contentar con aclarar que dintel es una mujer MUY atractiva. alonit
alonit, tú, que me debes ver con muy buenos ojos (o entre legañas). ;P
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