29/11/08

El muro

Me pierdo entre mis murallas que algún día, puede que en mi infancia, fueran blanquecinas. La vida nos cambia y nos encierra dentro de nuestros miedos y angustias. Mil esperanzas, mil expectativas se mitifican y se amontonan formando las piedras de ese muro. Así perdemos nuestra infancia, así crecemos en la monotonía, sedimentando ilusiones incumplidas.

¿Qué sentido tiene salir de nuestro perímetro? El muro protege aquello que sentimos. “Cuando más te miras una cosa, más se transforma” por esto vivimos tras la palpebral pared alta.

16 comentarios:

Raquel dijo...

Te escucho y entiendo, y sólo añado que el esfuerzo y las ganas nos ayudan a encontrar esas otras cosas que renuevan ciertas ilusiones. Pero no siempre del todo.
O ciertas palabrejas nuevas como... aja, palpebral. (Amable la R.A.E. que me dice lo que significa).

Mari Triqui dijo...

Los miedos le restan a la vida.
Las expectativas y las angustias también. Se trataría de buscar algo que sumarle, algo que de verdad funcione, pero, ¿qué?, ¿fluir, por ejemplo?

(¡Qué difícil la práctica, qué fácil la teoría!)
Besos!

Mari Triqui dijo...

jajajaja... igual de madrugadoras!!

momo dijo...

De algún modo todos nos perdemos un poco cuando nos refugiamos demasiado en los muros que nos cobijan pero , son tan protectores.
Un beso , me he quedado muy atrás de tus escritos, por la farrrta de tiempo cuyons.
talueguin

Cabiria Rausell dijo...

Yo me quedo con Heráclito: todo fluye.

Blau dijo...

Mi muro es enormeeee.

Un beso

soyborderline dijo...

Por cierto, terminé hace tiempo con "Nunca me abandones" y quedé un poco desencantada no ya por el enfoque y la forma, quizá sí por la cantidad de cabos sueltos...No llego a entender como puede pasar por alto cosas tan elementales e innatas que vienen de serie al nacer como es la inquietud, el incorformismo, la superación...y todo queda en dejarse llevar por el destino.
Entiendo perfectamente toda la información que no ha sido revelada y lo que eso conlleva pero, creo que el ser humano siempre se resiste a aquellas circusntacias que reconoce como amanezas a la supervivencia, y de una manera u otro existe una lucha.
Quizá intenta encontrar una similitud con con el destino que ha tenido y tiene la sociedad, ajena a cúal es su cometido. y las diferentes formas de posicionarse.
En fin, un saludo.
Respecto a lo del muro, creo tanto en lo que es, en lo que no fue, en lo que no será y si lo será. Creo que es necesario tener una colección de esperanzas, de derrotas, de sueños, de espectativas, de fracasos...y si además estos nos ayudan a madurar ciertas facetas pues mucho mejor.
Yo también creo en el "principio de incertidumbre"

Anónimo dijo...

¿Y ese muro no tiene alguna rendija?
Petonets

Sandra Sánchez dijo...

Hay que saltar el muro,pero muchas veces nos resulta díficil y nos acomodamos tanto bajo él que nos llegamos a creer que somos felices ahí...

helen dijo...

los muros hay que traspasarlos ;)
besiños

Saltinbanqui dijo...

Uis palpebral, vaya palabrita... ahora busco que significa exactamente y me la quedo.

;)

Elipse dijo...

Dintel el muro guarda hermeticamente nuestros sentires,pero...para que tenerlos guardados si podemos compartirlos!!!
Besos!

Mármara dijo...

Qué bonita palabra, palpebral (he tenido que ir a mirar el significado). Sin embargo, he de disentir. Quizás acumulamos miedos, es cierto, quizás coleccionemos expectativas frustradas, pero estoy convencida de que lo primero nos hace más sabias y lo segundo, más prudentes.

la cocina de frabisa dijo...

Es cierto que los años nos van metiendo en un círculo del que por pereza o por nuestros propios miedos nos cuesta salir.

Lo conocido asusta menos, sentimos que controlamos, claro que un día bajamos la guardia y nos colamos por esa rendija que olvidamos tapiar y lo desconocido vuelve a invadirnos.

Anónimo dijo...

Querida Dintel,este texto es perfectamente aplicable a mi problema con la agorafobia.Me oprime,me traumatiza,me impide ser feliz.Llevo las manos llenas del cal(pero esto es un secreto que sólo te confieso a ti).
Un abrazo.

Irreverens dijo...

Hay que ventilar siempre. Ya lo decía mi abuela. Levantamos muros a nuestro alrededor, no digo que no, pero yo al mío intento tenerlo lleno de ventanucos y puertecillas...
:)

(Por cierto, que casi me hago un nudo en la lengua con lo del palpebral... ¿porqué me recuerda a "pebre"? Voy a buscar lo que significa.)